
¿Por qué incluir niacinamida es lo mejor que harás por tu rutina de skincare?
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¿Por qué incluir niacinamida es lo mejor que harás por tu rutina de skincare?
Si estás buscando un ingrediente que lo haga casi todo, la niacinamida podría convertirse en tu nuevo mejor aliado. Versátil, bien tolerada por la mayoría de los tipos de piel y con beneficios comprobados, este derivado de la vitamina B3 ha ganado su lugar como uno de los ingredientes estrella del skincare.
¿No estás segura de para qué sirve o si es para ti? Aquí te contamos por qué agregarla a tu rutina puede marcar un antes y un después en la salud y apariencia de tu piel.
1. Equilibra la producción de sebo
¿Tienes piel mixta o grasa? La niacinamida ayuda a regular el exceso de grasa sin resecar. Esto no solo mejora el brillo indeseado, sino que también puede ayudar a prevenir brotes de acné relacionados con la obstrucción de poros.
2. Reduce el enrojecimiento y la inflamación
Tiene un efecto calmante y antiinflamatorio, ideal para pieles sensibles o con condiciones como rosácea o acné activo. Ayuda a reducir la apariencia de la piel irritada y reactiva.
3. Desvanece manchas y mejora el tono desigual
Una de sus funciones más valoradas es su capacidad para inhibir la transferencia de melanina, lo que significa que ayuda a atenuar manchas, marcas post-acné y zonas oscuras, dejando un tono de piel más uniforme con el uso constante.
4. Fortalece la barrera cutánea
La niacinamida estimula la producción de ceramidas, lípidos esenciales que mantienen tu piel hidratada y protegida. Una barrera fuerte es clave para prevenir irritaciones, sensibilidad y pérdida de agua.
5. Potencia la hidratación sin sensación pesada
Actúa como un potenciador de hidratación, ayudando a que otros ingredientes (como el ácido hialurónico) funcionen mejor, sin dejar sensación grasa o pesada en la piel. Perfecta si buscas una piel jugosa pero equilibrada.
6. Compatible con casi todo
A diferencia de otros activos más intensos, la niacinamida suele llevarse bien con la mayoría de los ingredientes, incluyendo retinol, vitamina C, ácidos exfoliantes e hidratantes. Ideal para quienes usan rutinas con múltiples pasos.
¿Cómo usarla?
Puedes encontrarla en serums, tónicos, cremas o limpiadores, en concentraciones entre el 2% y el 10%. Lo ideal es comenzar con una concentración media (5%) si nunca la has usado, y aplicarla después de la limpieza y antes de la crema hidratante.